Cómo alcanzar realmente a su audiencia de destino
Comprender la diferencia entre traducir y localizar puede ser confuso hasta para el cliente con más conocimiento.
Localizar tiene un valor agregado que interpreta el contenido de origen y realmente hace que la traducción parezca como que fue escrita en el idioma de destino. No solo se trata de la perfección lingüística y duradera de las reglas de la gramática, sino de considerar la importancia de los matices culturales cuando se trata de transmitir su mensaje a la audiencia de destino.
Tomemos por ejemplo la traducción en inglés del adjetivo elegible. Puede ir del término en español simple, literal y dudoso “elegible”, hasta una opción más elaborada como “reunir los requisitos” o “tener derecho a”. Recientemente tuve una discusión sobre el uso de “tener derecho”. Los hispanohablantes en los EE. UU. podrían comprenderlo como tener un derecho legal o constitucional inalienable o indiscutible. Desde mi punto de vista, esto es en parte debido al concepto anglosajón de las leyes y derechos; la necesidad de definir si es blanco o negro, sin tonalidades intermedias.
Las culturas latinas en las que el español es el idioma más hablado en relación al tamaño de la población, tienden a ser más flexibles. Para un país latinoamericano, “tener derecho” significa que tiene el derecho pero no hay una certeza acerca de la posibilidad de que dicho derecho sea ejercido. Aunque no trato de iniciar una discusión distinta, esta idea puede estar relacionada con la incertidumbre legal que existe en muchos de los países latinoamericanos.
De cualquier forma, la adaptación cultural puede hacer una diferencia.
Si tiene alguna pregunta en especial sobre alguna particularidad cultural o adaptación como la discutida aquí, no dude en comunicarse con uno de nuestros expertos que le pueden guiar a través de estas complicadas traducciones y localizaciones del español al inglés.
(Traducido del original de Horacio C.)