Bilingüe y bicultural
Mucha gente cree que cualquiera que hable bien una segunda lengua puede ser un buen traductor. Pero no sólo es necesario que el traductor sea bilingüe sino también «bicultural».
Conocer la cultura de su «segunda lengua» es imprescindible para el traductor. Una profesora en la universidad nos decía: «Una palabra de fácil traducción es Christmas: la buscamos en el diccionario y ahí está: Navidad. Pero frases como «Christmas mood» (humor o atmósfera de Navidad) o «Christmas landscape» (paisaje navideño) no van a expresar lo mismo en inglés que en español (ni en finlandés, ni en ruso…), ya que la «experiencia de la Navidad» en un país sudamericano, por ejemplo, en pleno verano, no tiene nada que ver con la Navidad bajo la nieve en los Estados Unidos o en países europeos.»
Un diccionario no basta para traducir bien. No se trata de traducir sólo palabras. Por ejemplo, se pueden conocer las palabras «learn» y «ropes», pero no entender el significado de la frase idiomática (idiom) «learn the ropes» (aprender a hacer algo), y no podríamos traducir «every Tom, Dick and Harry» (= todo el mundo) como «cada Tom, Dick y Harry», porque no tendría sentido. También se debe saber sobre ciertas frases que requieren una combinación especial de términos (collocations) y no otra: aunque cualquiera entendería Happy Christmas o Merry Birthday, esas combinaciones, si bien no serían «incorrectas», sonarían tan extrañas como Contento cumpleaños o Dichosa Navidad.
Hay que tener en cuenta las referencias culturales. En un libro de veterinaria que tuve que traducir, aparecía una indicación de cierto procedimiento que había que realizar en la cría de conejos «en enero y febrero»… pero si la traducción era utilizada en el hemisferio sur, cualquier procedimiento realizado en esos meses (pleno invierno) iba a tener lugar en los meses de verano, con quién sabe qué consecuencias para los pobres animales. (En ese caso se decidió agregar entre paréntesis «en el hemisferio norte» y dejar a los veterinarios deducir que si estaban en el sur, debían cambiar los meses por julio-agosto.)