Un poco de historia: la primera intérprete latinoamericana
Se la conoce por los nombres Malintzin, Malinalli (transliteraciones al castellano del nombre original; el sufijo tzin se añadía al nombre para indicar jerarquía y nobleza), o bien La Malinche, que es la forma más común de referirse a ella, o «Doña Marina». Malineli Tenepatl (c.1502 – c.1529) era de la alta clase mexicana y siendo todavía niña, fue cedida como tributo a los caciques mayas de Tabasco después de una guerra entre mayas y aztecas, por lo que hablaba con fluidez su lengua materna, el náhuatl, y la lengua de sus nuevos amos, la maya.
Los caciques de Tabasco se la regalaron aún esclava a Hernán Cortés, después de que él derrotara a los tabasqueños en la «Batalla de Centla». Cortés la bautizó «Marina» y la regaló a su vez a uno de sus capitanes. Al descubrir que ella habla náhuatl, empieza a utilizarla como intérprete náhuatl-maya, ocupándose Jerónimo de Aguilar (un náufrago español que había estado cautivo, rescatado por Cortés) de la traducción maya-español. Así, con el uso de tres lenguas y dos intérpretes, se llevaron a cabo todos los contactos entre españoles y aztecas, hasta que Malintzin aprendió castellano: se supone que esto no tardó en ocurrir, porque las crónicas indígenas suelen olvidar a Jerónimo de Aguilar, como si Malintzin hubiera sido siempre la única intérprete.
Además de este servicio, Malintzin asesoró a los españoles sobre costumbres sociales y militares de los nativos, y posiblemente también se encargó de lo que hoy llamaríamos tareas de «inteligencia» y «diplomacia».
Existen muchas leyendas y suposiciones poco comprobables sobre la Malinche. De su nombre deriva la palabra «malinchismo» utilizada en México, que indica la preferencia de lo extranjero frente a lo nacional, el deseo de sentirse extranjero antes que mexicano, oportunismo, traición a lo propio en favor de lo foráneo. Pero al no haber unidad, y sí gran enemistad, entre los pueblos de México, Malintzin no tenía patria que vender.
También algunos pocos la consideran «primera madre de México», evocando el nacimiento de una nueva patria y, en un sentido general, la maternidad.
(Datos extraídos de: http://es.wikipedia.org/wiki/La_Malinche)